El llamado «crimen perfecto» ha sido un tema recurrente tratado en infinidad de ocasiones tanto en la novela negra como en el cine del género policíaco.
Cuando todavía disfrutaba de la lectura, el jefe de la policía local de Tomelloso, Plinio, creado por Francisco García Pavón fue un gran descubrimiento para mi, tal vez fuera el primer personaje genuino de la novela policiaca española pero a mi entender ese honor creo que se lo merece con creces Pepe Carvalho de Manuel Vázquez Montalbán.
El sargento Bevilacqua mientras le da vida a un derrotado soldadito de plomo junto a la grata compañía de la guardia civil Chamorro y el comisario Salvo Montalbano del italiano Andrea Camilleri (todo un guiño a Vázquez Montalban) completan mis esenciales, dispares y selectos club de detectives .
En la pequeña pantalla en los años 70 y 80 todos los que pasamos de los críticos 40, recordaremos a Cannon, Kojak, a la cándida e inocente Jessica Fletcher, el raruno Teniente Columbo y el exótico Thomas Magnum.
La combinación de serie detectivesca y romantica también tuvo su hueco con Remington Steele o Luz de luna con un joven y con pelo Bruce Willis y la jamona de Cybill Shepherd.
Aunque de todos yo me quedo con uno de los detectives más duros de la pequeña pantalla,con su bigote, labio cortado y el siempre melancólico sonido del saxofón, Mike Hammer.
Las reseñas en el séptimo arte son interminables y seleccionarlas es misión imposible en tan innumerable elenco de personajes, tenemos desde el duro detective privado Philip Marlowe ( Humphrey Bogart) en El Sueño Eterno (1946), al terco Bud White (Russell Crowe) en L.A. Confidential (1997), el caótico Inspector Clouseau (Peter Sellers) en La Pantera Rosa (1963), al racional y veterano Detective William Somerset (Morgan Freeman) en Seven y el siempre magistral Jack Nicholson dando vida al detective Jake Gittes en Chinatown (1974)
Toda esta influencia hizo que en su día me apasionara de manera obsesiva compulsiva (como todo en mi vida) el mundo del crimen, así que investigué, me empapé leyendo y aprendí mucho sobre todo en hechos veridicos, uno de los que más me llamó la atención, tal vez por ser hoy en día uno de los casos sin resolver, fue el asesino del zodiaco.
El Asesino del Zodiaco fue un asesino en serie que acechó el norte de California entre diciembre de 1968 y octubre de 1969. En una carta supuestamente suya confesó asesinar a 37 víctimas, aunque las únicas víctimas confirmadas fueron cuatro hombres y tres mujeres de edades entre los 16 y 29 años. De las mismas, sólo dos sobrevivieron para dar evidencias sobre la identidad del asesino, aún desconocida. Se estimó que el Zodíaco -así era como él mismo se denominaba- tendría entre 20 y 30 años en el momento de sus crímenes; que era blanco, corpulento, de pelo castaño, que tenía conocimiento sobre lenguajes cifrados y poseía una gran inteligencia.
El 1 de agosto de 1969 tres cartas escritas por Zodiaco llegaron a la redacción de Vallejo Times Herald, San Francisco Chronicle y San Francisco Examiner. En ellas, casi idénticas entre sí, él reconocía los tres crímenes e incluía un criptograma de 360 caracteres que desvelaba su identidad.
Las cartas enviadas por el criminal conformaron el inicio de la lucha mediática que éste mantendría con las autoridades y con la prensa. El remitente exigía que los comunicados fueran impresos en la primera plana de los respectivos periódicos, y amenazaba con que, en caso contrario, se vería en la obligación moral de tener que.asesinar a una docena de personas escogidas por las calles al azar ese mismo fin de semana. Por fortuna nunca se llevaron a efecto los anunciados crímenes pues las cartas pudieron leerse en la primera plana de los periódicos.
Aquella amenaza conformaría únicamente la primera muestra dentro de una sucesión de alardes y chapuzas que, en el marco de un perverso juego del gato y el ratón, la vanidad del psicópata emprendió, aún a riesgo de dejar indicios aptos para conducir finalmente a su arresto.
La identidad del asesino sigue siendo una incógnita. Aunque Arthur Leigh Allen fue el sospechoso principal del caso, el Departamento de Policía de San Francisco declaró la investigación «inactiva» en abril de 2004 pues a finales de 2003 el caso del Zodíaco tuvo un impactante descubrimiento, ya que las huellas de la famosa carta no coincidían con las huellas de Arthur, aunque todas las pistas indicaban que era él. En marzo de 2007 se reabrió el caso.
En el 2007 el para mi siempre genial David Fincher dio vida cinematrográfica a tan truculenta historia, el resultado, excelente, de obligada visión para todos los amantes del thriller.
Una de las teorías más impresionantes, tienen que ver con el nombre y el signo que eligió el asesino para identificarse ¿Por qué el nombre de Zodiac y por qué esa marca con las que firmaba todas sus cartas?
Cual fue la casualidad que Arthur Leigh Allen el principal sospechoso para los investigadores portaba un reloj de la marca Zodiac, ¿curioso el nombre, verdad?, pues aún falta otro singular dato ¿os imaginais cual es el logotipo de la marca relojera……?
Hoy vamos a hablar de un Zodiac muy especial, personalmente para mi, una de las creaciones más maravillosas y originales de la relojería en los años 70, el Astrographic.
«Los suizos han puesto un pequeño punto rojo en órbita»
Así anunciaban su lanzamiento al mercado en 1971, sí ya su diseño era excepcional su coranzoncito le iba a la par, un movimiento automático KXF 88D, una gran modificación del calibre AS1688 con rotor añadido y finalizado con un sitema Hi-Beat de 36. 000 alternancias que fue llamado Split Second Timing (SST) que hacian que el hiptonizador punto rojo flotara como sí el Sputnik se tratase dando la vuelta a la órbita terrestre. Mentar que en el modelo de mujer portaba como muestran los anuncios un movimiento 34 y con 28.800 alternancias.
Como muestra un botón.
El secreto para causar tal efecto se basaba en la superposición de tres discos acrilícos transparentes sobre el dial en vez de las típicas manillas.
Hubieron cuatro tipos diferenciados de los Astrographic en rasgos generales:
El Oval.
Aparecido en 1971, tanto en caja dorada como en acero, fechador a las 12 o a las 3 y con modelo para hombre o para mujer, como suele ser habitual este último de tamaño más contenido, el de hombre rondaba los 40 mm.
El Square.
Aparecido un año mas tarde en 1972 fue un diseño mas clásico y elegante, también en caja dorada o de acero, variados diales y en tamaño de hombre o mujer.
El TV
El más escaso de todos y el de mayor tamaño, aparecido en 1973.
El astroquartz de 1977
Fue el primer Astrographic con movimiento de cuarzo, en concreto un ESA 9362.
Los otros.
Entre estos modelos surgieron otros menos comunes, como en 1973 el Astrodigit mezcla de Astrographic y Jump Hour.
El 1200 Vickers
El de forma de rombo, la verdad sea dicha muy poco conozco de esta variedad aunque por la apariencia me parece un reloj diseñado para las féminas.
O la moderna edición conmemorativa 2000 para celebrar los 30 años del Astrographic.
Me despido con un gran poeta que se nos fue estas Navidades.
Besos para los buenos y carbón para los malos, esta noche fijo que pillo a los Reyes Magos.
Fuentes: El pozo de sabiduría de Crazywatches. Wiki Whattimeisit.jimdo.com La botella de cava fresquita que me acabo de meter entre pecho y espalda.
27 marzo, 2022 en 9:37 PM
Por cierto,soy nacido en CReal,cerca de Tomelloso
Y me apasionan los casos de Plinio